El campeonato de Fórmula 1 sigue su curso por América con una de sus paradas más emocionantes: São Paulo. El color, la fiesta y una apasionada afición se juntan durante un fin semana en una de nuestras ciudades favoritas. Si quieres aprovechar al máximo de tu visita y descubrir joyas más allá del circuito de Interlagos, te traemos algunas recomendaciones para ver, comer, beber y hospedarse durante el Gran Premio de Fórmula 1 en São Paulo.
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¿Dónde comer?
Mocotó
Llegar a este local, del chef Rodrigo de Oliveira, no es fácil. Ubicado en la zona norte de la ciudad, además del tráfico hay que considerar las filas, aunque, en este caso, la espera es parte de la experiencia. Después de anotarse, uno se sienta a tomar caipirinhas y, cuando la mesa está lista, la comida típica del noreste del país sabe todavía mejor.
Casa do Porco
Janaina Torres y Jefferson Rueda convirtieron este local del centro de São Paulo en un templo dedicado al cerdo. Ellos mismos crían a sus animales, lo que les permite garantizar la calidad. Aunque hay clásicos que nunca salen de la carta, como el Porco San Zé y el torresmo con guayaba, cada temporada presentan un menú.
Vista
Ubicado en lo alto del Museo de Arte Contemporáneo –obra del famoso arquitecto Oscar Niemeyer–, Vista ofrece gastronomía típica brasileña con un panorama inmejorable: el gran Parque Ibirapuera.
Mani
De entre todas las opciones que ofrece el bohemio barrio de Pinheiros, Mani nunca falla. La chef Helena Rizzo rescata ingredientes autóctonos y los fusiona con platos de inspiración europea y asiática.
Aizomê
En medio del bullicio de la Paulista, un puerta teletransporta a los transeúntes a Japón. En el último piso de este edificio (Japan House), la chef Telma Shiraishi ofrece una carta clásica que incluye sushis y sashimis de la mejor calidad. Los menús que ofrecen a la hora del almuerzo son súper completos e ideales para los indecisos.
¿Dónde beber?
Tan Tan/Kotori
Dos locales hermanos que ofrecen gastronomía de inspiración asiática acompañada de algunos de los mejores tragos de la ciudad. Ubicado en una zona muy animada, sobre todo por las noches, se podría empezar con algunas brochetas del Kotori acompañadas de un Haiboru Clássico para seguir después con los tragos más sofisticados de Tan Tan, como el Mr. Olympia, que lleva açaí, o el Old Passion, que utiliza maracuyá. Aquí, el acompañamiento ideal son los sandos, sandwiches japoneses.
Bar Moela Pinheiros
Para vivir la experiencia de un bar de rua, es decir callejero, Moela es un favorito porque parece informal –aquí se bebe sólo cerveza–, pero ofrece un menú digno de concurso. Hay que llegar con hambre y pedir el quiabo empanizado y la variedad de croquetas (la de betabel y la de costilla son especiales). Aunque el local esté completamente lleno, no hay que desanimarse, cualquier espacio en la calle se puede convertir en una mesa.
Bar Original
De esos bares que gritan clásico por todos lados: cerveza de barril, botanas y meseros de camisa blanca, chaleco negro y pajarita. El menú no es especialmente sofisticado, pero sí muy bueno. Hay que pedir el caldo de frijol, que se sirve acompañado de unos chicharrones cargados deliciosos.
Bar Veloso
Cualquier paulista sabe que no hay bar más tradicional en la ciudad que Veloso: famoso por preparar las mejores caipirinhas de Vila Mariana. Sin importar el día de la semana, siempre está a reventar. Para acompañar los tragos hay que pedir coxinhas, una especie de croqueta de pollo que es toda una institución brasileña.
Vila Madalena
Para no comprometerse con un solo local, lo ideal es ir a este barrio relajado y bohemio, y pasar la noche brincando de local en local. Todos los botecos ofrecen más o menos lo mismo: cervezas, caipirinhas y alguna cosa para comer. En todos hay música y en muchos es en vivo.
¿Qué ver?
Parque Ibirapuera
Este hermoso parque es una de las joyas de São Paulo. Durante las mañanas se llena de corredores y entusiastas del ejercicio. Además de las áreas verdes, cuenta con varios museos y edificios, la mayoría de Niemeyer –Museo de Arte Moderno, Museo Afro Brasil y el edificio de la Bienal, entre otros–.
A Casa do Vidro
Ubicada en el barrio de Murumbi, la que fuera la casa de la arquitecta italobrasileña Lina Bo Bardi se ha convertido en un hermoso museo. La casa es una caja de vidrio rodeada de exuberante vegetación: el principio más sencillo de la arquitectura convertido en arte.
Instituto Moreira Salles
Esta sede de la fundación creada por el diplomático y financiero Walter Moreira Salles fue construida por Paulo Mendes da Rocha. El museo tiene un tamaño muy manejable y una buena curaduría en cuanto a las exposiciones.
MASP
La colección más importante de arte clásico y moderno de Brasil se encuentra en este edificio excepcional, obra de Lina Bo Bardi. La estructura de concreto que flota sobre la Paulista, sostenida por cuatro enormes pilares rojos. El particular espacio de exposición es un reto museístico, pues no hay paredes en el gigantesco salón.
¿Dónde dormir?
Rosewood São Paulo
Con poco más de un año de vida, éste es el hotel más espectacular de la ciudad. Una gigantesca colección de arte contemporáneo decora cada pared y pasillo, con obras de reconocidos artistas como Vik Muniz o Virgílio Neto. Lo que fuera una antigua maternidad se convirtió en un complejo que incluye hotel, restaurantes, teatro y otros espacios de entretenimiento (Cidade Matarazzo), con la colaboración de Jean Nouvel y Philippe Starck en la arquitectura y la decoración, respectivamente. El interiorismo es ecléctico y elegante, el servicio impecable y el pão de queijo del desayuno memorable.
Fasano Itaim
La familia Fasano acaba de abrir su segundo hotel en São Paulo, ahora en Itaim. La cadena hotelera más exclusiva del país se distingue por un estilo sobrio y elegante, pero con notorios acentos brasileños. Este nuevo hotel no es la excepción. Por su ubicación, y la altura del predio, las vistas son muy buenas.
Palácio Tangará
No por nada lleva el nombre de palacio. Éste es el único hotel de Oetker Collection en América Latina y ofrece una de las estancias más exclusivas de la ciudad. Localizado a un costado del Parque Burlé Marx, algunos consideran que su ubicación es lejana del centro, pero, para quien viene al circuito de Interlagos, eso es una ventaja. Servicio impecable y una de las albercas más hermosas de la urbe.
Hotel Unique
Una media luna que flota sobre una avenida, se trata de una construcción atípica y extravagante de Tomie Ohtake, la cual, además de diseño, ofrece algunas de las mejores noches de la ciudad en el bar que ocupa la terraza.
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