Hay personas cuya principal motivación para emprender un viaje es la gastronomía del destino, ya sea auténtica comida portuguesa o los platillos más extravagantes. Sin embargo, los amantes de la cocina italiana pueden estar contentos, pues Airbnb Experiences organizará una serie de clases magistrales de cocina en Italia, en donde cualquier persona podrá participar.
¿Cómo inscribirse al evento?
El único requisito es tener más de 18 años y poder cocinar una receta familiar tan especial y única que llame la atención de los jueces. En caso de resultar seleccionados, Airbnb pagará una estancia completa en Pollenzo, Italia, sede de la Universidad de Ciencias Gastronómicas. Pueden revisar aquí el portal para postularse.
Cabe resaltar que los elegidos podrán mejorar su receta y aprender de diversas técnicas culinarias de la mano del chef y fundador de los restaurantes Momofuku, David Chang. La idea es que, en 2020, Airbnb Experiences publique un recetario basado en los platillos trabajados durante los talleres.
Pollenzo, un pueblo del Piamonte italiano.
Esta es la primera vez que Airbnb organiza un evento similar. Hablamos de cuatro cursos que tendrán una duración de cinco días y que comenzarán el 15, 22 y 29 de junio y 6 de julio de 2020. Además, no todos serán iguales. Mientras que uno se enfocará en la fabricación de pasta fresca, otro se concentrará en los platillos tradicionales de Corea. En cada uno podrán participar un máximo de 25 cocineros.
Aparte del elemento práctico de la comida, en los cursos también entrarán un poco de teoría. Y es que Luisa Torri, académica de la UNISG, impartirá un taller sobe reconocer sabores y aromas del chocolate, queso y vino. Por otro lado, el profesor de horticultura Francesco Sottile dará una charla de cómo cocinar de manera sustentable y de cómo se puede medir y minimizar el impacto de la industria alimenticia en el medio ambiente.
Airbnb Experiences ofrece clases de cocina guiadas por granjeros y familias locales. Foto: Airbnb
La cuna del movimiento Slow Food
Esta tendencia nació en la ciudad de Bra, al norte de Italia, y como su nombre lo implica, surgió como un contrapeso al acelerado crecimiento del fast food o comida rápida. Su iniciador, Carlo Petrini, instauró una serie de máximas pensadas en tomarse el placer de disfrutar la comida, apreciar el conocimiento gastronómico, reconocer la buena alimentación y llevarse la vida a un ritmo más tranquilo.
Desde su origen, el movimiento slow food ha cautivado a más de un restaurantero y chef, pues esta tendencia se ve cada vez en más establecimientos. Cobró tanta popularidad que ya cuenta con representaciones institucionales en diversos países e incluso inauguraron su propia escuela: la Universidad de Ciencias Gastronómicas en Pollenzo, un pueblo a las afueras de Bra.
Instalaciones de la UNISG.
¿Qué hacer en los alrededores de Pollenzo?
Este pequeño poblado en el corazón de la región del Piamonte, al norte del país, se encuentra a una hora en coche de Turín y a dos horas desde Milán. También está Bra, la ciudad vecina, que se erige sobre una loma. Uno de sus mayores atractivos, además de la vista que hay sobre el río Tanaro y las llanuras que lo acompañan, es una iglesia particular. Se trata dela Chiesa di Sant’Andrea, una obra de arquitectura barroca diseñada por el icónico Gian Lorenzo Bernini y construida entre 1672 y 1687.
Iglesia de San Andrés en Bra.
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