El arce es el árbol que produce la hoja emblemática de Canadá; de esta especie se obtiene la miel de Maple y los paisajes otoñales más icónicos que se caracterizan por el cambio dramático de follaje. Para aquellos que buscan sumergirse en las tonalidades y en la melancolía de esta estación quizá lo más recomendable es ir a visitar los intrincados bosques que están ubicados en las provincias de Québec y Ontario. Sin embargo, en México también hay una oportunidad de ver de cerca esta transición.
De hecho, los paisajes más otoñales de nuestro país están ubicados en Jalisco, cerca de pueblo de Talpa de Allende. Aunque parezca increíble ahí vive un bosque que durante esta época se llena de follaje en el que se pueden contemplar de cerca cómo lucen los famosos árboles de Maple.
Este pulmón verde mide unas 150 hectáreas y se localiza en las montañas templadas y húmedas de la Sierra de Manantlán en el estado de Jalisco. Además de sus estilados troncos de hojas estrelladas, es hogar de unas 60 especies de árboles y arbustos, por lo que aunque es posible visitarlo, lo más recomendable es no salirse del sendero marcado para no interferir con la vida del lugar.
Los inicios de este bosque
De acuerdo a los especialistas, el origen del sitio se rastrea en el periodo geológico del Mioceno, hace unos 23 millones de años. Época que se distinguió por las bajas temperaturas, lo que provocó que varias especies animales y vegetales del extremo más al norte del continente se trasladaran al sur, llegando a esta región de México.
A pesar de los años que acumula hay que destacar que este bosque es relativamente nuevo para el ser humano, ya que se reconoció su existencia en el 2000 cuando fue descubierto por el Dr. José Antonio Vázquez García, la bióloga Yalma Luisa Vargas Rodríguez y el técnico Fernando Aragón Cruz. Los expertos publicaron el hallazgo en el Boletín del Instituto de Botánica de la Universidad de Guadalajara.
Desde entonces, tanto especialistas como los habitantes cerca del bosque han luchado por la protección del sitio. Fue así que en 2016 se declaró como Área Natural Protegida al Parque Estatal de Arce. Además, varios locales se han encargado de promover en el sitio el turismo sustentable.
Talpa de Allende
Para encontrar este parque estatal se tiene que llegar primero al Pueblo Mágico de Talpa de Allende que se encuentra a poco menos de 200 kilómetros de Guadalajara, capital del estado. Este pueblo se distingue por los más de 3 millones de peregrinos que recorren una ruta de 117 kilómetros para visitar a la Virgen de Talpa.
Esta virgen se encuentra en la Basílica del pueblo, la cual fue construida en 1782 en un estilo churrigueresco y gótico. Todos los días se pueden ver en su puerta a más de una persona rezándole a la imagen, incluso hay quienes le llevan mariachi y banda.
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