Pocos lugares son tan impresionantes como el Museo de la Acrópolis. Aunque se cree que su mayor atractivo es su colección de cuatro mil piezas pertenecientes a la cultura griega (por algo es el más visitado), lo que en realidad quita el aliento es la forma en la que este edificio de arquitectura contemporánea convive no sólo con las reliquias que posee, sino también con las ruinas de la civilización cuyo legado quiere preservar.
Este recinto se encuentra en la ciudad de Atenas y a poca distancia de templos como el de Atenea. En su interior resguarda valiosos objetos de una de las civilizaciones que más han aportado a la humanidad.
Pasear por su invaluable colección resulta de sumo interés, y para probarlo escogimos estas 10 piezas, verdaderos tesoros del lugar que hay que admirar en este museo.
Los frisos del Partenón
Estos relieves plasman la Gran Panathenaia, el festival más grande de la ciudad en honor a la diosa Atenea. Se trata de una enorme obra de 160 metros que consta de 115 bloques, lo cuales incluyen 378 figuras y deidades humanas y más de 200 animales, principalmente caballos. De esos 160 metros, 50 están en el Museo de la Acrópolis, 80 en el British Museum y el resto en distintos recintos del mundo.
Ofrenda a Nymphe
La zona en la que se encuentra el recinto estuvo lleno de templos dedicados a diferentes dioses, todos muy importantes para los ateneos, quienes llevaban ofrendas a las deidades. Un ejemplo de ello es esta pieza dedicada a la diosa Nymphe, quien era la protectora del matrimonio y las ceremonias de boda.
Foto: Museo de la Acrópolis
Relieve de Mujer Danzante
Otro valioso ejemplo de las grandes ofrendas que los antiguos griegos llevaban a los templos de sus dioses es este relieve de una mujer danzante, el cual estaba destinado a Dionisio, quien era considerado el dios del vino y las celebraciones.
Antenor Korai
El templo principal de la Acrópolis estaba destinado a la diosa Atenea Niké, por lo que aquí se encontraban las ofrendas más importantes. El tipo, el material y el tamaño de estos objetos reflejaban el estado financiero y social de la persona; los artículos de más valor fueron las estatuas de mármol de Korai (mujeres jóvenes). Esta es la pieza más grande encontrada.
Loutrophoros
En excavaciones hechas en un nivel más profundo de los templos, se encontraron distintos artefactos de uso cotidiano para los habitantes de la antigua Atenas. Entre las piezas más rescatables están las de barro como esta vasija que más bien es un loutrophoros (recipiente para llevar agua para el baño matrimonial) que representa a los recién casados.
Foto: Museo de la Acrópolis
Metopas del Partenón
Uno de los tesoros más preciados de este museo son las metopas del Partenón. Estos 92 relieves cuentan las historias de batallas legendarias. Entre ellas están las victorias de los atenienses contra los persas, la guerra de los dioses olímpicos contra los Gigantes, la lucha de los jóvenes atenienses contra las amazonas y la lucha de los jóvenes de Tesalia contra los Centauros.
Prokne e Itys
Esta escultura es la escena de la historia de Prokne, la hija del rey de Atenas Pandion. Aquí se muestra lista para matar a su hijo Itys. con la intención de vengarse de su esposo Tereus, el rey de Tracia, por deshonrar a su hermana Philomela.
Cariátides del Erecteion
Las cariátides son las columnas con forma de mujer. Las que alberga el museo son las originales del Erecteion –las que están en las ruinas son copias–. Este templo estaba consagrado a los dioses Atenea, Poseidón y Hefesto, así como a Erecteo, el rey mítico de Atenas.
Ofrenda a Asclepios
Cerca de la Acrópolis se encuentra un santuario y centro de sanación de Asclepios, dios de la medicina y la curación. Esta es una ofrenda encontrada en el lugar y el relieve plasma al dios con su esposa Hepione y su hija Hygieia, quienes reciben regalos de los fieles.
El Moschophoros
Esta es una de las ofrendas más antiguas de la Acrópolis. Se trata de una estatua de un hombre barbudo que lleva un becerro para darlo en sacrificio a los dioses. La escultura cuenta con una inscripción que dice, de derecha a izquierda: Dedicado a Rhombos, hijo de Palos.
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