Seis décadas de carrera, más de 100 expediciones submarinas, miles de horas bajo el agua, 250 publicaciones bajo su nombre, numerosas especies descubiertas, un centenar de premios y reconocimientos en todo el mundo, más de 160 áreas marinas protegidas gracias a ella. Los números sólo sirven para darnos una ligera idea del tamaño de legado que Sylvia Earle ha dejado en los océanos, a los que ha dedicado toda una vida de estudios y exploración.
No es por nada que ahora en el mundo de la investigación se le conozca como “Her Deepness”, pues la doctora Earle ha sido una auténtica pionera de las profundidades, en más de un sentido. Ha sido Testimonial de Rolex desde 1982, fue la primera mujer en ocupar el cargo de científica en jefe de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) y en 1979 estableció un récord mundial al realizar la inmersión más profunda en solitario y sin cable, caminando a 381 metros bajo la superficie del océano Pacífico. Más de 40 años después, ese récord sigue vigente.

En 1970, Earle dirigió una expedición completamente innovadora, incluso para nuestros tiempos, liderando al primer equipo de acuanautas conformado exclusivamente por mujeres para explorar las profundidades de las Islas Vírgenes de los Estados Unidos. Ella y su equipo pasaron dos semanas sumergidas, a bordo del Tektite II, a una profundidad de 15 metros bajo la superficie. Ese tiempo, no sólo sirvió para comprender mejor los efectos que la vida en el agua tienen en el cuerpo humano, pero también para observar y conocer la vida marina de la región como nunca se había hecho.
Aunque es cierto que la carrera y los esfuerzos de la doctora Earle le han dado varios reconocimientos personales y récords a su nombre que parecen imbatibles, en realidad todo tiene un objetivo mucho mayor: la protección y preservación de los océanos. Hablamos del ecosistema más grande del mundo, que no sólo permanece relativamente inexplorado, si no que se encuentra desamparado. Actualmente, sólo el 8% de los océanos están protegidos, sin embargo, existe un compromiso global por aumentar ese número. Más de 100 países están dispuestos a que al menos 30% del ecosistema marino quede oficialmente resguardado antes del 2030.

El trabajo de Sylvia Earle resulta crucial para alcanzar esta meta, más urgente que ambiciosa. Los 60 años de sus innovadoras expediciones en el ámbito le han dado al mundo de la ciencia mucha más claridad sobre las áreas y las especies que tenemos que proteger, pero, sobre todo, la han convertido en una de las voces más vocales sobre la necesidad de estas acciones. Con el apoyo de aliados clave, como la Iniciativa Perpetual Planet de Rolex, Earle además ha tomado el asunto en sus propias manos, con la creación de Mission Blue.
Mission Blue
Después de décadas de inmersiones y exploración, en 2009 Sylvia Earle supo que la única manera de alcanzar la protección total del océano era en equipo. Entonces se imaginó una red global de colaboradores que compartieran su objetivo y su pasión por los océanos. Una red de individuos y proyectos que, desde sus respectivas esquinas del mundo, fueran promoviendo la preservación marítima de manera local y, de esa forma, pudieran ampliar el territorio protegido. Así nació Mission Blue.
El innovador proyecto de la doctora Earle ha logrado crear más de 160 Hope Spots, como ellos denominan a las áreas del océano ecológicamente importantes y consideradas vitales para la salud marina. A 16 años de su fundación, ese número se ha elevado desde 50 áreas protegidas que incluyen áreas de inmensa biodiversidad, como las Islas Galápagos y el archipiélago de las Azores. Con el apoyo de Rolex desde 2015, Mission Blue promueve los esfuerzos locales de las organizaciones e individuos que están identificando y protegiendo Hope Spots en todo el mundo.

Con su iniciativa Perpetual Planet, Rolex apoya proyectos que transforman vidas y comunidades enteras, con el objetivo de construir un mejor planeta para todos. En Travesías, estamos dedicados a explorar el mundo con una mirada consciente y a contar historias que celebran la profunda conexión entre los viajes y la preservación, valores que compartimos profundamente. Por eso, y gracias a una larga relación con Rolex —una marca que, como nosotros, cree en la calidad, la innovación, la determinación y el espíritu emprendedor—, presentamos Guardianes del Planeta, una serie de perfiles sobre verdaderos catalizadores del cambio que trabajan por un futuro más sostenible y duradero.
Para más información, visita rolex.org #PerpetualPlanet