¿Mover un histórico bosque de Fuzhou a Shanghai? el nuevo proyecto de Aman en China lo hizo posible. Después de diez años de una ambiciosa hazaña de conservación arquitectónica y ecológica, el hotel Amanyangyun abrirá sus puertas a principios del otoño, convirtiéndose en la cuarta propiedad del grupo en este país.
La historia de Amanyangyun se remonta al año 2002, cuando más de diez mil árboles y 50 villas −provenientes de las dinastias Ming y Qing− en Fuzhou se vieron amenazadas por la creación de una nueva reserva natural. Fue entonces que, −en colaboración con distintos activistas, arquitectos y expertos en preservación histórica−, Aman comenzó un largo proceso de rescate y reubicación del místico bosque (ladrillo por ladrillo y árbol por árbol), mismo que resultó en un nuevo resort a las afueras de Shanghai. Con interiores y paisajes diseñados por Kerry Hill Architects y Dan Pearson Studio, Amanyangyun combina la espiritualidad del pasado con el lujo del presente. Sin duda una apertura que vale la pena marcar en el calendario viajero.

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¿Dónde? Maqiao Town, a 27 kilómetros (40 minutos en coche) de Shanghai.
Habitación: una de las Antique Villas, cada una con alberca y jacuzzi privado.

Imperdible: una visita al spa, ya sea para disfrutar del hamman (baño turco), banya (sauna ruso) o la sala de hidroterapia.
El detalle: Nanshufang (o Nanmu Studio), una casa dedicada a las artes y cultura tradicional china, donde los huéspedes pueden tomar talleres de caligrafía, pintura y artes marciales.

¿Qué comer? Amanyangyun cuenta con seis espacios gastronómicos, pero The Chinese Restaurant es la joya del lugar.
¿Qué tomar? hay que preguntar por la ceremonia tradicional de té e incienso (que se realiza en uno de los nueve elegantes salones de té del hotel).