Hacer de las maletas un capullo de plástico no es nada favorable para el medio ambiente.
Un palacio medieval restaurado y convertido en un hotel lleno de historia y jardines majestuosos.
Un evento astronómico que nadie vio venir.
Pintado en 1980, este cuadro es de los últimos que realizó el artista.
La convocatoria ha desatado controversias entre apegarse a lo original o aventurarse hacia una adaptación contemporánea de la catedral.
El arte y la cultura están dentro y fuera del hotel.