Un viaje por las regiones de Tabasco nos muestra cómo es que este estado en realidad es la puerta de entrada a toda la abundancia del sureste mexicano.
El recorrido a pie por los 110 kilómetros del Camino del Mayab es una inmersión a lo mejor del mundo maya: la selva, la cultura y su gente.
Si eres de los que llora o se pone sensible en el avión, esto tiene un por qué.
Una lista para viajeros aventureros y nostálgicos, aunque los trenes nocturnos también son una opción práctica para moverse por Europa.
El triciclo motorizado se ha convertido en un ícono del sur de Asia desde los años sesenta. Un sencillo vehículo ideal para sortear los estrechos y caóticos caminos de las ciudades más grandes de la región.
Colorado es uno de los destinos favoritos para esquiar y estas son algunas de las razones…
El tax refund es un esquema bajo el que varios países condonan impuestos sobre la venta las compras de los visitantes… pero tiene sus trucos.
La capital surcoreana merece mucho más que dos días, pero para los que se aproximan a ella por primera vez preparamos una pequeña guía para que descubran su riqueza (y quieran volver por más).
Tenemos mucho que aprenderle a los italianos, principalmente su forma de vivir enfocada en el disfrute y los grandes placeres.
Las playas remotas suelen ser opciones más accesibles, pero hay algunas ciudades que quizá te sorprendan.
Este fue el lugar donde los británicos izaron su bandera cuando llegaron a Hong Kong, pero ahora se ha convertido en un barrio de moda que mantiene algo de su esencia.
En Finlandia se toman el sauna muy en serio. Más que una terapia de spa, es una cuestión histórica y espiritual.
Creamos un itinerario para conocer un pedazo de la cultura coreana, a más de 11,000 kilómetros de Seúl, en México, donde se pueden probar sabores tradicionales o incluso comprar algo del famoso skincare que llega del país asiático.
Si empacas de manera consciente, tu próximo viaje puede ser más ligero y organizado.
Dos horas con 13 minutos tarda el Shinkansen en recorrer la distancia entre Tokio y Kioto. Sin embargo, nosotros optamos por la ruta más larga: caminar durante tres días entre las montañas.