Con más de 400 propiedades en 80 países, la colección de The Leading Hotels of the World incluye opciones para todo tipo de viajeros, entre ellos, los interesados en el bienestar. Estos tres hoteles en Riviera Maya tienen en común el haberse convertido en miembros de LHW recientemente; además, son ideales para una escapada wellness ya sea con sesiones eternas de spa, relajación en la playa o actividad física intensa.

UNICO 20º87º

A pesar de ser un all-inclusive de 448 habitaciones —casi todas con vista al mar— UNICO se caracteriza por su atención en los detalles. Cada huésped cuenta con su propio “anfitrión local” (su versión de concierge), quien se encarga de coordinar distintos aspectos de la estancia, desde el menú de almohadas y fragancias para aromaterapia hasta las excursiones por la zona. De hecho, antes de partir hacia cualquiera de sus tours —ya sea una visita a algún cenote o un paseo por comunidades mayas—, se le entrega a los viajeros un kit con protector solar, repelente de insectos, gel corporal y toallitas húmedas.

Las amenidades de baño son Botanicus, una marca mexicana que elabora productos de belleza biodegradables a base de aceites y extractos naturales. Esta misma fórmula de lo sustentable se replica en todos los aspectos del hotel, por ejemplo, en la coctelería. El mixólogo Luis Felipe Vallejo procura que la mayoría de sus ingredientes sean frescos y hechos en casa —jarabes, bíters y licores—. Por su parte, el spa cuenta con 26 cabinas de tratamientos, circuito de hidroterapia y un silencioso patio central con jacuzzi que funciona como un pequeño oasis de paz.

Hoteles LHW en la Riviera Maya

Chablé Maroma

Todos los días a las siete de la mañana, los huéspedes de Chablé Maroma reciben una canasta con café y pan recién horneado en la terraza de su villa. También el itinerario de las actividades del día: yoga en la playa, paddle board, kayak y hasta clases de cocina. Un poco más tarde, el restaurante Kaban ofrece todo lo que uno espera de un desayuno saludable: bowls de avena con fruta, toasts con verduras y smoothies frescos; sin dejar a un lado las opciones más sustanciosas, como chilaquiles, huevos motuleños y pan francés. Para una cena más formal está el restaurante Bu’ul y para disfrutar del atardecer —con trago en mano—, el Raw Bar.

En la propiedad hermana de Chablé Resort se respira calma, privacidad y descanso tanto en las áreas comunes como en las 70 villas escondidas entre la vegetación, todas con una pequeña alberca privada. Sin embargo, el protagonista de su oferta de bienestar es el spa, donde dan ganas de quedarse días enteros entre masajes clásicos, tratamientos especializados y una terraza con jacuzzis superagradable. El hotel también cuenta con temazcal, a unos pasos del mar.

TRS Coral Hotel

En este hotel, la imagen paradisíaca del Caribe —arena blanca y mar color turquesa— se hace realidad. Tener a Isla Mujeres justo enfrente (como una especie de barrera protectora) ha minimizado la llegada del sargazo, así que los huéspedes no se tienen que limitar a las albercas y pueden descansar, nadar y asolearse en la playa sin preocupación alguna.

Para los que entienden bienestar como actividad física, TRS Coral Hotel es sede del Rafa Nadal Tennis Centre, un proyecto desarrollado en conjunto con la academia del tenista español, ubicada en Mallorca. Con ocho canchas de arcilla —tres de ellas cubiertas—, aquí se puede acceder a distintos programas de alto rendimiento para todo tipo de niveles. El complejo también cuenta con cancha de futbol, pádel, gimnasio y un museo que los aficionados al deporte blanco seguro disfrutarán.

Los huéspedes también pueden hacer uso de los servicios e instalaciones del resort vecino —Grand Palladium Costa Mujeres—, entre ellos el Zentropia Palladium Spa & Wellness, un espacio de casi cinco mil metros cuadrados (con acceso a las áreas húmedas), donde dejarse consentir después de una sesión de intenso ejercicio.